‘Juego de Tronos’: George R.R. Martin demanda a ChatGPT junto con otros dieciséis escritores

JUSTICIA – George R.R. Martin, el autor de la saga “Juego de Tronos”, y otros escritores han iniciado demandas contra la startup californiana OpenAI, a la que acusan de haber utilizado sus obras para crear ChatGPT en violación de sus derechos de autor, según informó AFP este jueves 21 de septiembre.

En la demanda presentada este martes ante un tribunal federal de Nueva York, acusan a la empresa de haber utilizado sus libros “sin autorización” para entrenar su modelo de lenguaje, una tecnología de inteligencia artificial (IA) basada en ChatGPT, un software capaz de generar todo tipo de textos ante consultas simples en lenguaje cotidiano. “En el corazón de estos algoritmos se encuentra el robo sistemático a gran escala”, declaran los abogados.

Entre los demandantes en esta acción colectiva se incluyen el Authors Guild (organización que representa a los escritores) y varios escritores, entre ellos George R.R. Martin y el novelista John Grisham.

Artistas, organizaciones y programadores han presentado muchas otras quejas contra OpenAI y sus competidores.

Lo que solicitan los autores

Los modelos lingüísticos “comprometen la capacidad de los escritores de ficción para ganarse la vida, ya que permiten a cualquiera generar automáticamente y de manera gratuita (o a muy bajo costo) textos por los cuales, de otra forma, tendrían que pagar a los autores”, argumentan los abogados en la demanda.

También sostienen que las herramientas de IA generativa se pueden utilizar para producir contenido derivado, que imita el estilo de los escritores. “De manera injusta y perversa, (…) la copia deliberada de la obra de los demandantes los convierte, por lo tanto, en motores de su propia destrucción”, afirma la demanda.

El gremio y los autores solicitan que se prohíba el uso de libros protegidos por derechos de autor para entrenar modelos lingüísticos “sin autorización expresa”, así como una compensación por daños y perjuicios.

OpenAI, ya objeto de otras demandas

OpenAI no respondió de inmediato a una solicitud de AFP. La compañía necesitaba grandes cantidades de texto hallados en línea para entrenar su modelo de lenguaje, pero nunca especificó exactamente qué sitios y escritos se utilizaron.

Catapultada entre los gigantes de la IA gracias al éxito de ChatGPT a finales del año pasado, OpenAI ya es blanco de otras demandas similares, incluida una acción de un grupo de ingenieros informáticos que también involucra a Microsoft, su principal inversor, y a la plataforma GitHub. Además, los artistas presentaron una demanda en enero contra Stability AI, Midjourney y DeviantArt, cuyos programas se basaron en numerosas obras visuales en Internet.

A principios de septiembre, Microsoft anunció que proporcionaría protección legal a sus clientes demandados por infracción de derechos de autor sobre contenido generado con sus herramientas de inteligencia artificial generativa.

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